El primer colágeno natural totalmente sostenible desarrolla Lycolab 

Lycolab

La bióloga técnica Beatriz Uralde inició en 2015 un camino que ha derivado en la empresa dedicada al colágeno natural Lycolab. Mediante el programa Inizia de la UPV/EHU, la bióloga empezó a investigar en un terreno que estaba plagado de caracoles. Tras cinco años de investigación, la empresa ha conseguido desarrollar el primer colágeno natural liofilizado certificado por Ecocert, que garantiza el bienestar animal a través de una metodología registrada y patentada. Creado como ‘spin off’ de la Facultad de Farmacia de la UPV/EHU y en colaboración con el Centro de Investigación Lascaray, hoy en día la compañía está ubicada en el Parque Tecnológico de Álava.

Mediante la acreditación de Ecocert, se garantiza que para desarrollar el producto no ha habido maltrato animal, y las técnicas usadas para su obtención no dañan ni el medio ambiente ni el producto. “El proceso es controlado y supervisado, asegurando la calidad y trazabilidad de los productos en un entorno natural y biotecnológico,”, explica la CEO y socia fundadora de Lycolab, Beatriz Uralde. De hecho, para ser considerado colágeno natural, el producto debe cumplir tres características principales: ser estable en su composición y extracción, cumplir con los requisitos sanitarios y cumplir con los requisitos de certificación natural en su obtención y producción.

Actualmente, Lycolab está franquiciando la metodología de obtención del colágeno natural a entidades que apuesten por este nuevo mercado, siempre teniendo en cuenta la innovación y la sostenibilidad. “Queremos poner nuestra metodología al servicio de una empresa reputada y consolidada en el mundo de la cosmética y/o de la salud que apueste por la innovación natural y el desarrollo sostenible que pueda introducir e implementar con más acierto que nosotros el colágeno natural en el mercado, además de poder seguir caracterizándolo para otras aplicaciones sanitarias”, declara Beatriz Uralde.

Cabe destacar que Lycolab ha recibido la ayuda del Grupo SPRI mediante su programa Inplantariak. “Recibimos asesoramiento sobre marketing digital y fue una experiencia muy provechosa”, destaca Uralde. De cara al futuro, el plan de la compañía es conseguir la colaboración con una empresa del sector cosmético o de la salud para poder seguir desarrollando su metodología. “Estamos valorando cuál es el movimiento más eficiente y con visos de éxito”, finaliza la CEO.

El Grupo SPRI es uno de los agentes que ponen en marcha la estrategia RIS 3 Euskadi para impulsar la especialización inteligente en los ámbitos de la energía, la fabricación avanzada, la biosalud y la nanociencia.

Vía SPRI