Orkestra: el País Vasco mantiene sólidas sus bases de competitividad y bienestar

Orkestra

Según el Informe de Competitividad 2022, a pesar de la situación coyuntural de los últimos, el País Vasco presenta mejoras en dimensiones como el aprendizaje, el medioambiente, o la internacionalización

La economía vasca presenta una recuperación robusta tras la caída de actividad experimentada en 2020 como consecuencia de la crisis sanitaria. Sin embargo, en las circunstancias geopolíticas actuales es muy difícil prever la evolución de la situación coyuntural porque requiere una adaptabilidad alta por parte de empresas, gobiernos y otros agentes de competitividad.

El Informe de Competitividad 2022, elaborado por Orkestra-Instituto Vasco de Competitividad (Fundación Deusto) con la colaboración del Grupo SPRI, analiza la situación del País Vasco en términos de bienestar y desempeño económico-empresarial para identificar acciones que apuntalen la competitividad del futuro más allá de la situación actual de incertidumbre. El diagnóstico ha sido presentado ante los medios por el presidente de Orkestra, Iván Martén Uliarte, la directora del Instituto, Mari Jose Aranguren, y el director de investigación, James Wilson.

Según Martén, los pilares de competitividad y bienestar de un territorio son sus personas y valores, y su tejido económico. “Por eso, en este informe ponemos el foco en analizar estos dos pilares de la competitividad territorial, para determinar cómo podemos responder a los retos coyunturales y afrontar los temas estructurales”, ha asegurado.

Por su parte, Aranguren ha destacado que la sociedad “está afrontando unas transformaciones profundas que condicionarán el futuro de forma sustancial y con impactos todavía aún por ver”. Estas transiciones cuestionan nuestras bases de competitividad y de bienestar, pero también generan oportunidades de crear nuevos negocios y empleo, según la directora de Orkestra.

Recuperación económica y de bienestar, aunque no completa

El análisis de los resultados económico-empresariales del País Vasco realizado por Orkestra es consistente con la turbulenta situación que está viviendo la economía global en los últimos años y ofrece una imagen con claroscuros, con algunos indicadores que mejoran (PIB per cápita, la rentabilidad y las exportaciones) y otros que empeoran (innovación y emprendimiento) debido al impacto de las crisis.

– El PIB per cápita se situaba un 9% por encima de la media de la UE-27 en 2021. Aunque aún no ha recuperado la ventaja del 15% que tenía antes de la pandemia, su crecimiento es más fuerte que la media europea.

– Según las cifras preliminares, se constata una recuperación de la rentabilidad empresarial tras el deterioro causado por la pandemia

– Entre los resultados de internacionalización destacan las exportaciones de bienes y servicios, que en 2021 aumentaron en el País Vasco más que la media europea, y que han llegado a niveles récord in 2022.

– La productividad aparente del trabajo (€/persona) muestra una recuperación del 5,1% en 2021, en camino para recuperar los niveles de productividad prepandemia.

– La proporción de pymes innovadoras ha sufrido un ligero descenso del 41% al 39% en 2020. Las ventas de productos nuevos (3,5 p.p. menos en 2020) y el porcentaje de empresas de alto crecimiento (9,6% en 2021, frente al 11,5% en 2019) también se han reducido.

El análisis de los resultados de bienestar refleja que la percepción de la población vasca sobre su nivel de bienestar es positiva. Sin embargo, en el contexto de la crisis causada por la pandemia y la situación geopolítica, hay dimensiones que muestran una evolución negativa.

– El indicador de satisfacción con la vida, que mide las percepciones sobre el bienestar global entre la población, mejora respecto a 2020 (7,4) y se sitúa en un 7,6 (en una escala del 1-10), por encima de la media europea (7,1).

– La proporción de la población con algún nivel de educación postobligatoria ha aumentado 2,6 puntos porcentuales en 2021, cerrando la brecha con otros territorios. Euskadi también ha incrementado su liderazgo en aprendizaje permanente, situándose en un 16,9% frente al 10,8% de la media de la UE-27.

– Los principales indicadores medioambientales han evolucionado relativamente mejor que en la media de la UE-27 y reflejan la transición hacia una economía y sociedad verdes. La contaminación del aire se sitúa en un 8,1 respecto al 13,2 de la media europea, y las emisiones de gases de efecto invernadero han caído de 8,5 toneladas de CO2 equivalente per cápita a 7,5. No obstante, hay que interpretar este descenso con cautela porque está asociada con la caída precipitada de actividad económica causada por la pandemia.

– La renta mediana equivalente de los hogares bajó ligeramente en 2020 (de 22.638 a 22.537€ ppa) pero sigue estando un 24% por encima de la media de la UE-27.

– En 2021 se produjo un incremento en el porcentaje de personas en riesgo de pobreza o exclusión (16% frente al 13,6% de 2020), sin embargo el nivel de desigualdad en ingresos se ha mantenido bajo en comparación con otros territorios. La ratio S80/S20, que compara los ingresos del 20% de la población con la renta más alta con los ingresos del 20% de la población con la renta más baja, se sitúa en el País Vasco (4,8) en niveles similares a la media de la UE-27 (4,9) y de Alemania (4,87).

– La tasa de desempleo (9,8%) se encontraba en 2021 por encima de la media europea (7,4%). Sin embargo, las cifras del primer y segundo trimestre de 2022 (8,7% y 8,8% respectivamente) apuntan a la tendencia positiva en el desempleo que caracterizó el periodo prepandemia.

En resumen, el diagnóstico concluye que los resultados de competitividad y bienestar en el País Vasco continúan siendo sólidos, y aunque la situación coyuntural de los últimos años ha impactado negativamente en algunas dimensiones (como la vida material, la innovación en las pymes, o la productividad), en otras se han observado mejoras (como el aprendizaje, el medioambiente, o la internacionalización).

Las bases de la competitividad del País Vasco: su estructura económica-tecnológica, su sofisticación, la estructura demográfica, y la cultura y valores de la sociedad

El año pasado, Orkestra presentó un nuevo marco de competitividad que incorpora las dimensiones del bienestar para realizar un diagnóstico territorial más ajustado a la realidad. Este año, el informe estudia otro elemento fundamental de ese marco: el contexto estructural, que se refiere tanto a la estructura económica-tecnológica como a la estructura demográfica y de valores.

– La evolución de la estructura económica del País Vasco en la década previa a la pandemia muestra cambios en la especialización relativa a Europa de las actividades manufactureras y de los servicios relacionados con la industria, que a grandes rasgos son consistentes con el foco en la Industria 4.0 de la estrategia vasca de especialización inteligente.

– El análisis de la sofisticación del tejido productivo toma en cuenta tanto la diversidad de actividades en que un territorio está especializado como su singularidad; es decir, que sean actividades en las que pocas regiones están especializadas. En el caso del País Vasco, se ha mantenido una sofisticación alta en el contexto europeo en cuanto a actividades manufactureras, aunque ha habido una pérdida de posiciones en el ranking de sofisticación que considera todas las actividades de la economía.

– La especialización tecnológica del País Vasco se corresponde, en general, con las actividades industriales donde presenta fortalezas y se observa una clara alineación con la estrategia de especialización inteligente (PCTI 2020 y PCTI 2030).
En cuanto al análisis de la estructura demográfica, se confirman las proyecciones realizadas en anteriores Informes de Competitividad (por ejemplo, en el de 2011).

– Se constata el aumento de la tasa de envejecimiento, que ha pasado del 18% en 2001 al 23% en 2021, y está previsto que alcance el 29,3 % en 2036. De hecho, según las proyecciones demográficas, el crecimiento de la población previsto para 2035 vendrá exclusivamente del saldo migratorio positivo. Precisamente por eso, será primordial cuidar la buena integración del colectivo inmigrante de distintos perfiles y trabajar su capacitación e incorporación al mundo laboral de forma alineada con las necesidades de las empresas y del territorio.

Asimismo, el informe realiza por primera vez un análisis de los valores de las personas, debido a su vinculación con el modelo de bienestar de una sociedad.

– Todos los grupos de edad, y especialmente las generaciones más jóvenes, tienen actitudes favorables a la inmigración y a la participación de las personas inmigrantes en el mercado de trabajo. Además, el análisis de los valores muestra que las generaciones jóvenes cuentan con una alta valoración de aspectos como “la tolerancia y respeto por los demás”.

– Respecto a las dimensiones de la vida a las que la población vasca da más importancia, destaca la familia en primer lugar en todos los tramos de edad analizados. Entre las generaciones más jóvenes (<50 años), tenemos en segundo lugar el valor del trabajo, donde se priorizan más aspectos como el salario y el horario que la posibilidad de toma de iniciativa o responsabilidades.
5 ejes de acción transversales para guiar a las empresas, los gobiernos y otros actores

Para abordar los retos asociados con los cambios en la estructura económica y demográfica, y aumentar la capacidad de adaptación continua que demanda este entorno de incertidumbre, Orkestra identifica cinco ejes de acción transversales sobre las palancas de competitividad que deben guiar la actuación de las empresas, los gobiernos y otros actores:

1. Fomentar el liderazgo de una nueva competitividad industrial sostenible, respondiendo al importante reto estructural medioambiental. Se enfatiza la apuesta por una transición verde ordenada y con el menor coste social posible, para competir en un mundo que requiere una mayor sostenibilidad.

2. Fortalecer las capacidades de las personas para contribuir a la competitividad y al bienestar, de forma alineada con las necesidades emergentes del territorio. Además de aumentar las tasas de actividad y empleo, fomentar la capacitación de las personas e impulsar la integración de las personas inmigrantes, será fundamental promover políticas de recursos humanos innovadoras que contribuyan a la atracción, retención y desarrollo de talento.

3. Trabajar la cultura, capacidad y orientación de la innovación de las empresas, la Administración y el territorio en su conjunto. Es necesario seguir invirtiendo en I+D+i y reforzando las capacidades científicas del territorio, así como mejorar continuamente las capacidades de las personas, adaptándolas a las oportunidades derivadas de la digitalización, la sostenibilidad o el envejecimiento de la población.

4. Reforzar un tejido económico sofisticado, capaz de evolucionar hacia nuevos nichos de especialización sobre la base de las fortalezas industriales que tenemos. Debemos prestar atención a las conexiones entre las diferentes actividades de la industria y entre la industria y los servicios relacionados, fortaleciendo la cooperación multinivel y la público-privada para detectar y aprovechar oportunidades que aumenten la sofisticación del tejido industrial.

5. Profundizar la conectividad internacional de la economía y la sociedad para abrir oportunidades. Integrar una perspectiva internacional, aumentando tanto la actividad de Euskadi en el exterior y la conexión internacional de los proyectos e iniciativas que se desarrollan en el territorio permitirá avanzar en el desarrollo de nuevos mercados y fuentes de financiación, la atracción y retención del talento o el aumento en la sofisticación del tejido económico y tecnológico.

La presentación del informe se realizará mañana en la Conferencia de Competitividad, que tendrá lugar en el atrio de la Biblioteca CRAI de la Universidad de Deusto (Bilbao) a las 16:00 y que contará con la participación de la Consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno Vasco, Arantxa Tapia. Habrá también una ponencia de Pascale Le Blanc, profesora de la Universidad de Eindhoven, sobre el impacto de la innovación tecnológica en el capital humano y una mesa-debate acerca del reto del talento en la que, además participarán Aitor Urzelai, director general de SPRI, y Sonia Garai, directora de RRHH de Arteche.

Informe completo

Vía SPRI