Surf Irekia, tecnologías abiertas para que todas las personas disfruten de las olas

La asociación 3DLan y la escuela Barrika Surf Camp han creado Surf Irekia, una propuesta para acercar este deporte a las personas con discapacidad. La iniciativa cuenta con el apoyo de la Diputación Foral de Bizkaia y Laboral Kutxa, y participan las principales asociaciones de discapacidad de Bizkaia. El proyecto consiste en diseñar y fabricar tablas adaptadas, con la ayuda de la impresión 3D, y crear los protocolos necesarios para que personas con discapacidades físicas o intelectuales puedan disfrutar de la experiencia del surf de forma segura. 
 

¿De dónde surge la idea de crear Surf Irekia?

Egoi Azkarraga: El proyecto surgió en el programa Ocean Living Lab, un bootcamp organizado por GAIA y Beaz en 2019, donde participaron startups a nivel internacional relacionadas con el mundo del mar. Allí estaba también Barrika Surf Camp, una escuela de surf que había empezado a incorporar el surf inclusivo. Se encontraban con dificultades para encontrar material adaptado y nos propusieron colaborar, con la idea de abrir la experiencia del mar a más personas.

Alberto Martínez: En 3DLan trabajamos para facilitar la autonomía de las personas con discapacidad mediante tecnologías libres, especialmente con la impresión 3D, y una de nuestras líneas de trabajo es el deporte inclusivo. En principio, la idea consistía en crear una tabla adaptada, pero luego nos planteamos un proyecto más ambicioso, enfocado no solo a crear el material, sino a adaptar toda la experiencia de una clase de surf.

¿Y en qué punto está?

Egoi: lo primero que hicimos fue una investigación. Hablamos con otros proyectos que ya están trabajando en temas de surf adaptado como Surfability, en Gales, o Cisco Araña, en Brasil, para aprender de lo que ya se ha hecho. Y luego escuchamos mucho a las asociaciones de personas con discapacidad para saber dónde están las barreras porque a veces son físicas, pero otras veces están más relacionadas con el miedo a lo desconocido.

Alberto: Ahora tenemos dos prototipos. Logramos traer unas sillas de Gran Bretaña y estamos realizando las primeras pruebas con diferentes anclajes. Es un proceso de cocreación, así que se basa mucho en trabajar con los usuarios, las asociaciones y los profesionales. Eso nos está ayudando mucho porque es la forma de conocer las necesidades reales. También estamos trabajando con el estudio Abad para el diseño de la tabla. La idea es que todos sumemos para ofrecer esas clases con la mayor seguridad.

Habláis de una experiencia completa, más allá de los materiales adaptados, ¿a qué os referís?

Egoi: El modelo sobre el que trabajamos es el de situar a la persona en el centro, así que lo primero es conocerla, entender a qué tipo de discapacidad se enfrenta y lo que supone. Luego trabajamos la metodología, los protocolos a tener en cuenta a la hora de ofrecer este servicio… Porque el acompañamiento es muy diferente si es una persona con una discapacidad física o con TEA, por ejemplo. También está la parte de los materiales adaptados, que tienen que ser lo más modulares posible porque el ámbito de la discapacidad es muy diverso y las necesidades cambian. Y finalmente el entorno, que no haya barreras físicas para llegar al agua. No solo se trata de diseñar una tabla adaptada, es un proceso complejo donde hay muchas cosas a tener en cuenta.

Ya habéis empezado las clases, ¿cómo está siendo la experiencia?

Egoi: Se han hecho una veintena de clases, más o menos, sobre todo con personas con discapacidad intelectual. Ahí la metodología que hemos desarrollado tiene más importancia que la tabla en sí. Justo ahora hemos empezado una nueva fase con personas con discapacidad física y estamos probando el material adaptado.

Alberto: Las primeras personas que lo han probado están encantadísimas, se les ve en la cara lo bien que se lo pasan en el agua. El feedback ha sido muy bueno desde el primer momento, cuando nos acercamos a las asociaciones y compartimos la propuesta, porque para ellas es una oportunidad de ampliar las actividades que pueden realizar.

En septiembre vais a organizar un congreso internacional de surf inclusivo, ¿cómo va a ser?

Alberto: Nuestra idea es traer experiencias a nivel internacional en torno al surf inclusivo para compartir conocimiento, que nos cuenten cómo lo han hecho y aprender de ellos. Y lo mismo con Surf Irekia, que participen también las asociaciones, los usuarios de la escuela, deportistas… para compartir qué hemos aprendido, dónde hemos tenido problemas y cómo los hemos solucionado.

Egoi: Este verano para nosotros va a ser muy potente, en el sentido que vamos a poder contrastar las soluciones, y queremos compartir todo eso. La idea de organizar el congreso también está relacionada con la transparencia. En 3DLan trabajamos siempre de forma abierta, compartiendo todas nuestras creaciones y resultados para que más personas puedan aprovechar ese conocimiento.

Vía SPRI